Piden que se declare a Michoacán zona de desastre por heladas atípicas que afectó a 41 municipios

Que se declare en Michoacán zona de desastre natural de conformidad con las reglas de operación del Fondo de Desastres Naturales (FONDEN), toda vez que resultaron afectados 41 municipios michoacanos por las heladas, exhortó el diputado Erik Juárez Blanquet, presidente de la Comisión de Desarrollo Rural en el Congreso del Estado, además urgió a que se implemente un programa emergente de empleo temporal para apoyar las necesidades mínimas de las afectaciones registradas.

El diputado integrante del Grupo Parlamentario del PRD dijo que son 41 los municipios afectados por la helada atípica que afecto el bajío michoacano, de los cuales destacan Álvaro Obregón, Angamacutiro, Coeneo, Ecuandureo, José Sixto Verduzco, Morelos, Panindícuaro Vista Hermosa y Zinapécuaro, así como el deterioro de 16 cultivos como son trigo, lenteja, hortalizas y garbanzo entre otros.

Asimismo, el legislador del sol azteca en la LXXII Legislatura, consideró que al abandono del campo por políticas gerenciales, sustentadas en la especulación y en la explotación del campesino, hoy se suma una contingencia debido a las heladas que exhiben la suerte del campo, es la temporalidad climatológica, toda vez que no se ha desarrollado la tecnología correspondiente para que a través de sistemas de monitoreo se de certidumbre a la actividad del trabajador agrícola y a los mexicanos.

Michoacán como el resto del país padece las consecuencias del calentamiento global, en donde la agricultura y producción alimentaria se ven en riesgo, por lo que existe temor que a corto tiempo la gente del campo no pueda producir a cielo abierto el alimento necesario para que la población pueda subsistir.

Por ello destacó que presentará ante el pleno un punto de acuerdo para exhortar a los gobiernos estatal y federal ya que “esta helada que hoy padecemos, de no ser atendida en forma inmediata, oportuna e integral solo es el preámbulo de una desertificación, que hará inviable la vida rural aumentando por consiguiente el crecimiento desordenado de las ciudades, esto además de romper equilibrios en el desarrollo distorsiona el sentido social que debe motivar nuestra idea de futuro para todos los ciudadanos”.

Queda claro que la producción agrícola se ha visto disminuida, lo cual es claro reflejo de lo que hoy se está viviendo, diversas cadenas productivas, como limón, mango, jitomate, y de granos, han reconocido que ha reducido su producción.

Erik Juárez aclaró que las contingencias climatológicas no son privativas en Michoacán, sino que afectan gran parte del país, como son los estados de Sonora y Sinaloa. Por lo que representan afectaciones en los cultivos productivos, por la presencia de sequías, heladas, granizadas, nevadas, lluvias torrenciales, inundaciones, tornados y ciclones, todos caracterizados por ser atípicos relevantes, no recurrentes e impredecibles.

Sin embargo, el diputado por el distrito de Puruándiro consideró que la falta de una acción de política sustentable ha generado que la actividad humana este provocando que la naturaleza cobre las facturas con los cambios climáticos, ya que las contingencias se pueden considerar como “recurrentes” cuando se presentan cinco o más veces durante los últimos años.

Por tal motivo, el presidente de la Comisión de Desarrollo Rural destacó que es necesario que se promuevan acciones, contingentes y de excepción para apoyar a los agricultores, no obstante, reconoció que será muy difícil revertir el deterioro económico y social.

Ante ello, Erik Juárez insistió en que expondrá ante el pleno que al sector agrícola no se le puede, ni se le debe reducir el presupuesto, por el contrario se debe incrementar el apoyo económico, para fortalecerlo, se haga más rentable y productivo el campo, con el objetivo de que se tenga capacidad para generar empleos y desarrollar cadenas productivas que agreguen valor a la producción agrícola.

Finalizó que es apremiante que se declare a Michoacán como zona de contingencia climatológica, para que se liberaren los recursos a la brevedad posible y aplicarlos en las zonas de cultivo siniestradas y es apremiante que la Secretaría de Desarrollo Rural en el Estado, informe el número de hectáreas siniestradas y el impacto económico que éste tiene en las zonas siniestras, y diseñe un programa emerge de apoyo a los campesinos con semilla, fertilizantes, entre otros.